sábado, 6 de diciembre de 2008

Marina Nuñez


La Galeria Salvador Díaz- Madrid
Presenta una visión contemporánea del "infierno"
Nuñez toma la iconografía de la entrada al inframundo para acercarnos a las angustias de la sociedad mediada por los avances de la tecnología, genética y las nuevas formas de comunicación.
Este trabajo fue concebido inicialmente para la Catedral de Burgos, se compone de cuatro piezas. En una presenta un infierno donde combina elementos de ciencia ficción alusiones de El Bosco, ruinas futuristas donde vemos desechos humanos y espectros robóticos.
La segunda habla de Ícaro y del Ángel Caído, utilizando proyecciones de imágenes digitales.
Dos videos enseñan un ojo atrapado en una cueva, en alusión directa al mito de la caverna de Platón, siendo la oscuridad biológica la que impide ael acceso al conocimiento.
Una serie de pequeñas cajas de luz encierran sirenas deformes resultado de fallidos experimentos genéticos.
La estética cíborg es un imaginario de perturbadora belleza.
En la presentación de cinco artístas, hablé de Marina Nuñez como un referente, y he aquí una buena oportunidad para ver parte de su obra.

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